Receta de temporada — Salteado de tomates y calabacines al ajo

En casa siempre se ha cocinado con lo que había en el huerto. Esta receta es un clásico que suelo preparar en los meses más cálidos, cuando los tomates están jugosos y los calabacines tiernos. Es sencilla, rápida y, sobre todo, muy sabrosa. Perfecta como acompañamiento o como plato principal si quieres algo ligero pero lleno de sabor. Ingredientes (para 2 personas):

  • 2 tomates maduros grandes (tipo rama o corazón de buey)
  • 1 calabacín mediano, firme y liso
  • 2 dientes de ajo
  • 3 cucharadas de aceite de oliva virgen extra
  • Sal marina al gusto
  • Pimienta negra recién molida
  • (Opcional: albahaca fresca o unas gotas de vinagre balsámico)

Preparación:

  1. Lava bien los tomates y el calabacín. Corta los tomates en cubos medianos, procurando no perder demasiado jugo. El calabacín puedes cortarlo en medias lunas o en tiras finas, como prefieras.
  2. Pela y lamina los dientes de ajo. Calienta el aceite en una sartén grande a fuego medio y añade el ajo. Déjalo dorar ligeramente, sin que se queme, para que suelte todo el aroma.
  3. Incorpora el calabacín y saltea durante unos 4-5 minutos, removiendo de vez en cuando. Debe quedar tierno pero con un punto crujiente.
  4. Añade los tomates, salpimienta y sube un poco el fuego para que suelten el jugo y se mezclen con el resto. Cocina todo junto durante 6-8 minutos, hasta que se haya reducido un poco el líquido.
  5. Prueba y ajusta la sazón. Si quieres, añade unas hojas de albahaca fresca justo al final o un chorrito de vinagre balsámico para dar un toque diferente.

Cómo servirlo:

Este salteado es muy versátil. Puedes usarlo como guarnición para carnes o pescados, acompañarlo con arroz integral o quinoa, o simplemente disfrutarlo con una buena rebanada de pan artesano. Bonus casero: si te sobra, guárdalo en la nevera y al día siguiente puedes usarlo como base para una tortilla o como relleno de una empanada.